Para legalizar las escrituras de una casa en México, generalmente se deben seguir varios pasos y cumplir con ciertos requisitos. A continuación, te describo un proceso genérico que puede variar dependiendo de la entidad federativa en la que te encuentres y las circunstancias específicas de la propiedad. Es importante consultar con un notario público o un abogado especializado en derecho inmobiliario en tu localidad para obtener información precisa y adaptada a tu caso.

  1. Revisión de documentos: Verifica que cuentas con todos los documentos necesarios, como la identificación oficial del vendedor y del comprador, comprobante de domicilio, título de propiedad anterior, entre otros.

  2. Certificado de Libertad de Gravamen: Es necesario obtener este certificado para demostrar que la propiedad está libre de hipotecas o cualquier otro gravamen.

  3. Avalúo de la propiedad: Se debe realizar un avalúo reciente de la propiedad por un perito oficial para conocer su valor real y determinar los impuestos correspondientes.

  4. Pago de impuestos: Generalmente se deben pagar el Impuesto Sobre la Adquisición de Inmuebles (ISAI) o su equivalente en la entidad federativa, y el Impuesto Predial actualizado.

  5. Elaboración de la escritura: Acude a un notario público para que elabore la nueva escritura de propiedad. El notario verificará la legalidad de la operación y la identidad de las partes.

  6. Firma de la escritura: Las partes involucradas (vendedor y comprador) deben firmar la escritura ante el notario público.

  7. Inscripción en el Registro Público de la Propiedad: Una vez firmada y sellada la escritura por el notario, se debe inscribir en el Registro Público de la Propiedad de la localidad correspondiente para que tenga validez oficial y sea oponible a terceros.

  8. Entrega de la propiedad: El vendedor entrega la posesión física de la propiedad al comprador.

Las leyes y códigos que pueden estar involucrados en este proceso incluyen, pero no se limitan a:

  • Código Civil Federal y Códigos Civiles Estatales (para aspectos relacionados con la transmisión de la propiedad).
  • Ley del Notariado (que regula la función del notario público).
  • Ley del Registro Público de la Propiedad (que establece las normas para la inscripción de actos jurídicos relacionados con la propiedad inmueble).
  • Leyes fiscales estatales y municipales (que establecen los impuestos aplicables en la transmisión de propiedad).

Es importante señalar que el proceso puede variar y tener particularidades dependiendo de la legislación local y la situación específica de la propiedad, por lo que se recomienda asesorarse correctamente con un profesional.